2 Tesalonicenses 2:15

“Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.” 2 Tesalonicenses 2:15

Flojo

Vacilando

El enemigo imita, duplica, ilusiona para que creemos a lo que no es, en lugar de creer a lo que es.

Tenemos una advertencia en 2 Tesalonicenses 2:2 “que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra,” En aquella época, unos lobos rapaces estaban compartiendo “doctrina” como que si fuera de Pablo. Estaban usurpando la autoridad que Pablo tenía como un ministro de Jehová para sembrar engaño entre las ovejas.

Los mismos medios que puede utilizar Jehová para compartir la verdad, lo puede usar también el enemigo para sembrar el error. Además de la palabra hablada o de la palabra escrita por carta, hoy día tenemos libros, periódicos, la radio, la televisión, el Internet o el teléfono como medios accesibles a la mayoría de la población.

Mucho de lo que es compartido bajo la bandera de la verdad o la bandera de Dios es, al contrario, una afrenta a la verdad y una afrenta a Dios. Necesitamos una madurez espiritual para mantenerse firme en medio de las tormentas religiosas y doctrinales.

Efesios 4:14 “para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error,”

Aparte de las advertencias en contra de todo viento de doctrina (que son nada más que ideas, filosofías, cuentos y fábulas), encontramos también advertencias contra:

“la doctrina de los fariseos y saduceos” Mateo 16:12 – una doctrina de religiosidad, de hipocresía: haga lo que yo digo, no lo que yo hago
“la doctrina de Balaam” Apocalipsis 2:14 – una doctrina de lucro y ganancia propia
“la doctrina de los nicolaítas” Apocalipsis 2:15 – una doctrina de superioridad y poder

Gracias al Señor que Él nos dejó su Palabra para que podemos de nuestra propia cuenta estudiarla y entender por medio del Espíritu Santo lo que es la verdad. Y con conocer la verdad, y ser plantado en la verdad, nos animamos a nosotros mismos y también a otros. “conforte vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra.” 2 Tesalonicenses 2:17

Reflexión personal

Un yoyó va para abajo, va para arriba, va por un lado y va por otro lado. Que así no seo yo fluctuando por todo lado. Quiero ser inamovible y bien cimentado en la sana doctrina, en la verdad.